¿Qué es la Metatarsalgia?
La Metatarsalgia son un conjunto de signos y síntomas que provocan un cuadro doloroso, normalmente relacionado a hiperqueratosis bajo la cabeza de uno o varios metatarsianos, afectando directamente a los radios centrales.
¿Qué signos y síntomas presenta la Metatarsalgia?
- Fase 1: Dolor localizado en la zona de los metatarsianos centrales en deambulación o en reposo.
- Fase 2: Si la causa persiste se producen microinfartos dérmicos por isquemia compresiva, estimulando la síntesis de queratina en la epidermis.
- Fase 3: Si el proceso no se detiene la articulación genera un derrame seroso, formando un higroma o una bursitis.
- Fase 4: El metatarsiano genera una periostitis reactiva, provocando aumento de su cortical y su volumen. Pudiéndose apreciar un engrosamiento de las corticales de los metatarsianos afectados (efecto looser).
- Fase 5: Se produce una fractura espontánea como mecanismo de defensa, cuyo objetivo será buscar una nueva posición biomecánica.
- Fase 6: Debilitamiento de las estructuras tendinosas y capsulares, provocando la luxación de la articulación metatarsofalángica.
¿Cuáles son las causas de la Metatarsalgia?
Las causas principales de metatarsalgia valoradas por nuestros podólogos son las siguientes:
- Alteraciones en la fórmula metatarsiana por diferencias de longitud de los metatarsianos, afectando a la adecuada distribución de cargas entre ellos.
- Alteración posicional o alineación frontal. Cuando una o varias cabezas metatarsianas se sitúan en una posición más baja que las otras, haciendo que contacten con el suelo antes que las demás, sufriendo una hiperpresión anormal.
- Alteraciones del ángulo de ataque. Originadas por el comportamiento inadecuado de los metatarsianos en las diferentes fases de la marcha (rockers).
- Alteraciones rotacionales sobre el eje del segmento óseo van a alterar su área de carga creando puntos de hiperpresión.
- Alteraciones morfológicas. Los cambios en la estructura de las cabezas metatarsianas crean un problema de sobrecarga sobre sí mismas si la cabeza está hipertrofiada o trasladándose al vecino si está atrofiada; su origen suele ser congénito o traumático.
- Alteraciones en el paquete adiposo desprotegiendo las cabezas metatarsianas.
- Alteraciones de compresión entre dos metatarsianos unida a la acción del ligamento transverso intermetatarsiano, generan una neuropatía por atrapamiento, denominado neuroma de Morton.
- Alteraciones estructurales del pie estáticas o dinámicas del pie, como el pie equino, cavo, insuficiencia del primer radio, sobrecarga del primer radio, acortamiento de los gastrocnemios, insuficiencia del quinto radio…
- Alteraciones digitales de los dedos pueden generar un compromiso en la función de amortiguación o de propulsión, creando un aumento de fuerzas negativas sobre los metatarsianos, iniciando o aumentando un proceso de sobrecarga metatarsiana.
- Alteraciones sistémicas como lesiones neurológicas (parálisis, etc.), lesiones vasculares (síndrome de Raynaud, trombosis, etc.), lesiones metabólicas (gota, diabetes, etc.) y/o lesiones articulares (artritis reumatoide, etc.).
- Alteraciones externas. El continuo uso de calzados inadecuados, provocando desalineaciones digitales y alteraciones metatarsianas.
- Alteraciones yatrogénicas. Producto de intervenciones que no han conseguido el efecto corrector deseado.
¿Cómo se diagnostica la Metatarsalgia en la Clínica del Pie Ariño en Donostia – San Sebastián?
En la Clínica del Pie Ariño en Donostia – San Sebastián, nuestro equipo de podologos cirujanos realiza las siguientes pruebas para el diagnóstico de la metatarsalgia:
- Historia clínica para detectar la existencia de alguna posible alteración sistémica.
- Estado funcional del antepié (exploración y manipulación).
- Estudios biomecánicos de la pisada 3D para determinar la distribución de presiones tanto en estática como en dinámica y diferentes fases de la marcha.
- Diagnóstico radiológico del pie, para valorar la longitud de los metatarsianos (proyección anteroposterior), verticalización metatarsiana y morfología de las cabezas (perfil en carga y proyección de Walter-Múller).
- Diagnóstico ecográfico del pie para detectar lesiones de partes blandas como la enfermedad de Freiberg, neuromas de Morton…
- Análisis de la deformidad del calzado y su palmilla.
¿Cúal es el tratamiento conservador de la Metatarsalgia en la Clínica del Pie Ariño en Donostia – San Sebastián?
- Cambio de calzado con el objetivo de normalizar la posición del antepié.
- Plantillas personalizadas 3D con el objetivo de favorecer el reparto de cargas y evitar el agravamiento de la enfermedad.
- Tratamiento farmacológico: Antiinflamatorios no esteroideos, infiltraciones ecoguiadas, etc…
¿En que consiste la cirugía de mínima incisión de metatarsalgia en la Clínica del Pie Ariño en Donostia – San Sebastián?
El conjunto de procedimientos utilizados por el equipo de podólogos cirujanos de la Clínica del Pie Ariño en Donostia – San Sebastián los dividimos en dos grupos:
Técnicas directas :
- Osteotomía elevadora para corregir la dorsiflexión del metatarsiano.
- Osteotomía acortadora para acortar o, incluso, rotar los metatarsianos.
- Osteotomía combinada para elevar y de acortar del metatarsiano.
- Osteotomías múltiples sobre varios metatarsianos para evitar lesiones de transferencia.
- Osteotomía de Haspell para remodelar y disminuir el volumen de la cabeza metatarsiana.
- Osteotomías de descompresión para descomprimir la presión que las cabezas metatarsianas ejercen sobre los troncos nerviosos, generando una neuritis compresiva o un síndrome de Morton.
Técnicas indirectas:
- Técnicas de partes blandas implicadas en la deformidad.
- Osteotomías digitales (simples, dobles, artroplastias).
- Cirugía reparadora de la luxación metatarsofalángica.
¿Cómo es el postoperatorio de Metatarsalgia en la Clínica del Pie Ariño en Donostia – San Sebastián?
Al paciente se le recomienda realizar un apoyo precoz y comenzar la deambulación de inmediato. De esta manera, los metatarsianos se posicionan biomecánicamente en su lugar, al actuar las fuerzas de resistencia del suelo, consiguiendo la normalidad funcional de carga, y realinear la parábola metatarsiana sin alterar la articulación metatarso falángica (que queda intacta), ni la amplitud de movimiento.
- El manejo postoperatorio es mejor si lo realiza el cirujano que realizó la intervención, ya que conoce el pie operado.
- Al ser Cirugía de Mínima Incisión, no realizaremos fijación interna, por lo que no son necesarios los fijadores internos como placas o tornillos. La ubicación intracapsular y el diseño de las osteotomías nos permiten poder realizar la fijación con unos vendajes especiales.
- El paciente sale caminando del quirófano con un vendaje y calzado especial por su propio pie sin necesidad de muletas o bastones. Se recomienda caminar lo menos posible hasta el primer cambio de vendaje que será a las 24 horas.
- Se realizan curas y controles radiológicos cada semana durante 4 semanas hasta quitar el calzado postquirúrgico.
- Pasado el periodo postoperatorio el paciente podrá volver a utilizar su calzado habitual y caminar con normalidad.
- Realizamos controles radiográficos periódicos (al mes, y a los tres y seis meses de la cirugía) para verificar la consolidación ósea.
- La vuelta a la actividad deportiva de impacto como el running varía en función de la remodelación ósea de cada paciente, normalmente suele ser después de 8 semanas después de la intervención.