La fascia plantar es una aponeurosis gruesa y ancha compuesta de colágeno, elastina y agua. Está situada debajo de la piel de la planta del pie. Es uno de los principales estabilizadores del arco longitudinal del pie.
La fascitis plantar es un proceso degenerativo de los componentes de la fascia, debido al exceso de tensión e impactos que soporta la fascia plantar durante la marcha y/o carrera.
El espolón calcáneo son calcificaciones producidas por el exceso tensión y microtraumatismos que sufre la fascia plantar en su inserción en la tuberosidad medial del calcáneo, producida por una fascitis plantar prolongada.
La causa de la fascitis plantar es multifactorial, entre los que destacan la edad, el acortamiento de tríceps sural, el sobrepeso, calzado inadecuado, alteraciones biomecánicas, trabajos en los que se pasan muchas horas de pie y en deportistas por sobreuso.
El dolor más intenso de la fascitis plantar suele ser en la cara inferior e interna del talón, en donde la fascia se inserta en el calcáneo, y en el recorrido de la misma. El dolor durante los primeros pasos por las mañanas debido a la rigidez, después de periodos de reposo o actividades de impacto.
El dolor en la planta del pie es un motivo de consulta muy habitual en nuestra clínica, la principal patología es la fascitis plantar, pero no siempre es así. El diagnóstico de fascitis plantar debe ser clínico y físico, además de la realización de pruebas complementarias y un estudio biomecánico de la marcha 3D.
Las pruebas de imagen más utilizadas son el diagnóstico ecográfico del pie, resonancia magnética y el diagnóstico radiológico del pie. Otros estudios nos pueden ayudar a realizar el diagnóstico diferencial y detectar alteraciones como la analítica sanguínea la utilizamos para estudiar marcadores inflamatorios cuando tenemos sospecha de enfermedades inflamatorias como la artritis reumatoide, y enfermedades metabólicas como la gota.
Existen muchos tratamientos conservadores para fascitis plantar, en la Cínica Del Pie Ariño realizamos los siguientes en función del tiempo de evolución y la degeneración de la fascitis plantar. El 80% de los adultos sufrirán fascitis a lo largo de sus vidas, y en un 10% de los pacientes fracasan los tratamientos conservadores.
Desde la Clínica del Pie Ariño en Donostia – San Sebastián apostamos por un trato personal e individualizado a cada paciente, por lo que es necesario que reserve una consulta preoperatoria, para poder valorar su caso mediante diagnóstico radiológico del pie y técnicas complementarias, para poder elegir las técnicas quirúrgicas más adecuadas a su problema.
El paciente regresa caminando a su casa después de la intervención sin la necesidad de muletas ni bastones.
La intervención se realiza unicamente con anestesia local sin necesidad de anestesia general.
Incisiones de 2 a 3 mm sin necesidad de poner puntos.
El dolor postquirúrgico es mínimo, ya que apenas se realiza agresión en los tejidos.
Permite la reincorporación a la vida laboral en un breve espacio de tiempo en comparación con la cirugía tradicional.
No es necesario colocar tornillos ni agujas. El postquirúrgico se realiza con un vendaje y calzado especiales.